El circuito interior de Tuxtla Gutiérrez, imperiosa necesidad por encima de politiquerías.
Dos personajes importantes y ejemplares en Tuxtla Gutiérrez, como el empresario Rómulo Farrera y el propio director de Caña Hueca, Samuel León, reconocieron el valor de la modernidad de Tuxtla Gutiérrez, pero sobre todo su visión de que es una necesidad que tienen los Tuxtlecos sobre la importancia del próximo “Circuito Interior de la capital chiapaneca”, que le viene a dar una transformación completa a Tuxtla Gutiérrez, y que tanto lo requiere, después de que se construyeron y se siguen edificando nuevos “Pasos a Desnivel” que han venido mejorando la movilidad vehicular por toda la periferia de la ciudad capitalina, cerrando con broche de oro, la culminación de su primer “Circuito Interior” que es una columna vertebral elevada vial que fluye para mayor conectividad e infraestructura vial ante el preocupante número de vehículos que transitan diariamente por toda la ciudad Tuxtleca y que va en aumento.
Un “circuito Interior Vial” que tienen todas las principales ciudades del país y ya no se diga en sus capitales, y en un estudio nacional, son los “circuitos interiores” los que más exigen los ciudadanos porque les aligera y apremia la movilidad vehicular para transitar de un lugar a otro más rápido, sobre todo a sus centros laborales e instituciones educativas de sus hijos, por eso aflora a flor de piel la perversidad de algunos ciudadanos para desordenar y perturbar una obra vial de gran calado para la sociedad Tuxtleca, donde lo único que se advierte es un fantasma de grilla barata y vileza, con tintes electorales para demeritar imágenes públicas ante el escenario caliente que se vive en Chiapas con la sucesión sexenal. No hay otra explicación.
Durante la construcción de los “Pasos a Desnivel” que ya lleva la media docena, que circundan la capital de Chiapas, nunca hubo intentos de protestas, mucho menos de marchas desde que asumió la titularidad el actual Secretario de Obras Públicas de Chiapas, Ángel Torres Culebro, -porque es el segundo secretario de Obras en este sexenio- el proyecto del cambio de nomenclatura vial capitalino se echó en marcha sin ningún titubeo y vacilación, por el contario privó la admiración y lo estupefacto, porque significaban obras viales completamente modernizadoras, y que la población lo aceptaba, porque sexenios iban y venían y no se hacían este tipo de obras al menos en materia vial de la capital de Chiapas, todo marchaba bien, nomás vino el anunció en una conferencia de prensa aquel 16 de febrero de este año, y dentro de la misma conferencia de prensa, señoras y jovencitas y uno que otro Arquitecto, salieron destapados desde sus asientos empezando a desdibujar al circuito interior que mataría a todos las aves de Joyo Mayo y Caña Hueca, además que se derrumbaría árboles, en fin, que hasta desaparecerían estos emblemáticos lugares de recreación capitalinos.
El propio gobernador de Chiapas Rutilio Escandón, también desde hace dos años venía advirtiendo de la urgente necesidad de trasformar a Tuxtla Gutiérrez con una visión de “capital” y para ello se emprendería un trabajo de infraestructura vial moderno, y es lo que se viene haciendo, pero ese “Circuito Interior”, al que han demeritado, que aparte de mejorar al cien por ciento la movilidad vehicular, le da la apertura para que otros gobiernos a futuro aporten otros “circuitos interiores” porque en el futuro eso es lo que va a necesitar la ciudad, porque es lo que se están construyendo en otras ciudades del país que cuentan hasta con 20 o 30 “circuitos interiores” o distribuidores viales.
Cuando Carlos Han González, aquel memorable priista jefe del gobierno del DF, inauguro los ejes viales, la oposición política se le fue encima, cuando el Ahora Presidente López Obrador, fue también jefe de gobierno, inauguró los “segundos pisos”, y otra vez la grilla, o sea el primero del PRI, lo atacó la oposición, el segundo del PRD, lo atacaron los priístas. Ahora los resultados de los ejes viales y los segundos pisos en la ciudad de México, han sido los que han contribuido a que no se congestione la ciudad capital del país, y el tiempo fue la mejor respuesta de que ambos trabajos de Ingeniera vial, eran propositivos. Hay obras viales que se tienen que planear ni siquiera al futuro, sino a los resultados inmediatos, porque la vialidad es una primerísima urgencia ante los nuevos tiempos donde ya un automóvil, como un teléfono son casi productos personales, reconociendo que ya no es un lujo, sino una necesidad. Hay que ver solamente el número de vehículos que hay en movilidad en la capital chiapaneca.
Evidentemente que no nos debe de asustar esta rebatinga y plataforma de pillerías, jugarretas y bribonadas, el asunto es eminentemente electoral, porque los expertos han dicho que cuando una imagen electoral sube con el apoyo del pueblo, les preocupa a los adversarios, y como los ánimos están enardecidos en Chiapas con la sucesión, pues muchos ven ya moros con tranchete, porque consideran que estas obras viales viene originado una metamorfosis entre la ciudadanía, ante el grueso número de obra viales y otras tantas, que no es más que un proyecto sexenal del gobernador Escandón, y que ahora que se están haciendo, pues todo mundo anda sacado de onda, como muchas cosas nuevas que hace el Presidente López Obrador.
Si no fuera tiempos electorales no hubiera pasado absolutamente nada, pero inclusive el problema no es tanto eso, sino que se muestra el cobre de otros simpatizantes de otros pretensos o aspirantes al gobierno, que ven cómo se encumbra una figura de la función pública local –un fenómeno nunca antes visto- y que obviamente preocupa, porque si Zoe Robledo y Eduardo Ramírez Aguilar, son las piezas más consistentes para asumir una responsabilidad rumbo al Palacio de Gobierno, y que son el dúo con más resonancia, ahora hay que agregarle un tercero que se llama Ángel Torres Culebro, y que también se convierte en un producto local marca Chiapas, porque su labor es en la entidad, y no necesariamente proviene su política desde la capital del país.
Son postales interesantes, porque si hace meses era uno más Ángel Torrez Culebro, ahora con este tipo de campañas negras completamente inducidas desde la felonía y alevosía que no tenía razón de ser, lo llevaron a los cuernos de la luna, porque todo empezó con un mala visión táctica, la obra del domo de una unidad deportiva que se colapsó aquel 17 de febrero en Motozintla, ni siquiera fue una obra de su administración en su carácter de Secretario de la Obra Pública, sino del que fungió antes con esa encomienda publica.
Fue una jauría en las redes sociales en contra de Torrez Culebro, que nunca pensó que una infamia del colapso de un domo en la Sierra de Chiapas, hubiera servido para valorar su trabajo que se realiza dentro de la obra pública de Chiapas y ahora especialmente con la estructura vial que se construye estratégicamente en Tuxtla Gutiérrez. Lo que no se puede negar últimamente es que hay uno que otro empresario Panista de los llamados “caballeros de colon”, que invierten financieramente para la campaña negra para demeritar imágenes.
De 100 Tuxtlecos 97 están en favor de su primer circuito interior de Chiapas, aquí en la capital.